• Convulsiones febriles.
  • Obstrucción de la vía aérea.
  • Septicemia.
  • Síndrome de shock sètico estretocócico.
  • Reumatismo articular agudo: fiebre reumática.
  • Glomerulonefritis postestreptocócica.
  • Otras complicaciones.
 
 
   Las complicaciones a distancia que pueden producirse en diversos órganos, son derivadas de la respuesta inmune a la infección faringea por el estreptococo beta hemolítico del grupo A. Por eso se ha de tener en cuenta, que este germen es susceptible de producir infecciones también, aunque con menos frecuencia, en otros sectores de las vías aerodigestivas superiores, como las infecciones dentarias, otitis o tejido subcutáneo (erisipela). Se trata de patologías de patogenia autoinmune, atribuidas a que las proteínas de ciertos órganos son similares a los Ag de la cápside de esta bacteria.
 
 
   CONVULSIONES FEBRILES.
   Como ocurre con otros procesos febriles, en los lactantes y los niños pequeños las convulsiones son una complicación temida que se ha de prevenir.
 
 
   OBSTRUCCIÓN DE LA VÍA AÉREA.
   La inflamación amigdalar puede alcanzar dimensiones como para producir una obstrucción aguda de la vía respiratoria particularmente en niños.
 
 
   SEPTICEMIA.
   Es una complicación excepcional.
   Se produce por bacteriemia o envió de microbios sépticos a otros órganos. Puede aparecer en situaciones de inmunodepresión o de enfermedad sistémica grave, como diabetes, hemopatías, neoplasias, etc.
 
 
   SÍNDROME DE SHOCK TOXICO ESTREPTOCOCICO.
   También se ha denominado: gangrena estreptocócica, celulitis sinergística, celulitis anaeróbica no clostridial, celulitis necrotizante, gangrena de Fournier, erisipela necrotizante.